LOS APEGOS

Vinculo afectivo que se establece desde los primeros momentos de vida entre madre e hijo o cuidador e infante.

La función del apego es asegurar el cuidado sano y el desarrollo psicológico estable para que el niño convierta su personalidad en un adulto con estabilidad emocional. Hay 4 tipos de apegos..

El primero es el apego mas saludable, se conoce como:

1. APEGO SEGURO: Este tipo de apego es un vínculo en el que el infante siente que la persona con la que se vincula, madre o cuidador, esta ahí para protegerlo. Este tipo de apego le hace sentir al bebé incondicionalidad, se siente querido y aceptado y por tanto sus necesidades psicológicas y emociónales inmediatas, son satisfechas. Sin un apego seguro las inseguridades y la dificultad para interpretar el mundo afectivo se dará hasta niveles de la adultez llegando a desarrollarse un adulto con muchos miedos e inseguridades en todo su estilo de vida.
2. APEGO EVITATIVO: Este tipo de apego hace que el infante asuma el no poder contar con su cuidador; se convierte en un evitador del contacto cercano, desarrolla autosuficiencia compulsiva, despreocupación por la separación que podría confundirse con ser un niño seguro e independiente, pero la verdad es que hay un estrés oculto con mucho dolor que el niño evita el contacto y se vuelve poco expresivo de sus afectos. En la adultez una persona con apego evitativo, rechaza la intimidad y se le dificulta relacionarse con otras personas, o echar raíces.
3. APEGO ANSIOSO: En este tipo de apego el niño no confía en su cuidador, ya que es inestable e inconstante, las atenciones y el cuidado que el niño recibe. Por tanto este tipo de apego el adulto que lo desarrolle en su niñez se vuelve un adulto dependiente emocionalmente e incluso puede desarrollar una hiperpaternidad a la hora de convertirse en padre o madre.
4. APEGO DESORGANIZADO: Es la mezcla entre el apego evitativo y el apego ansioso. El niño pierde la confianza en su cuidador, se vuelve explosivo desde muy pequeño, daña juguetes, se le dificulta relacionarse, incluso tiene muchos conflictos con el cuidador mismo… No logra llegar acuerdos y no hay empatía entre ambos. En la adultez una persona con apego desorganizado se muestra frustrada, maneja mucho la ira y tiene muchos conflictos para relacionarse. Se vuelve un crítico constante, rígido e inestable para establecer relaciones de pareja.El apego es saludable en la niñez, pero debe ser un apego seguro. Si el apego no es seguro toda persona desarrollara miedo e inseguridades, y cualquier otro tipo de apego negativo que no facilita la interiorización de tranquilidad o de conexión equilibrada con el mundo exterior.

Si alguien reconoce que tiene cualquier tipo de apego diferente al apego seguro será importante buscar en terapia herramientas de sanación.